Poems from Death A Rehearsal for Love

by Carmen Váscones

translated by Alexis Levitin


Carmen Váscones (Poeta Ecuatoriana)

The great act of being

The great act of being

to render love before the door of God

decipher passion

to give a seal to pleasure

my destiny.

Surrounded by the brevity of joy

Surrounded by the brevity of joy

I disavow my being and multiply time

I need the foreign and the beautiful

my desire slithers pries into the other

taciturn from drowsiness and the encounter

we emerge in the confident image

I embrace intimacy to tremble perfection

we flee from numbers to the coming of pleasure

our witnessing

there is no mirror in the excommunication of the body

I compose no rites for the word

naked we caress the profane gaze of poetry

we mix the mortal and eternal

I leave the day

cling in secret to persistence

that spreads throughout my riverbed

my destiny plays at the fiction of absolute repose.

A whirlwind of eternity

A whirlwind of eternity

trembles in an embrace

engenders the absurdity of the game

worlds drunk

with curses and blessings.

Our bodies are a single freedom linked

provoked by purest innocence.

Scenario of doubt

In a scenario of doubt

the actor conceives anguish

fiction renews itself

the curtains gather in the last words enslaved by the script

the wager of love was not performed

its days lie between the estuary of the future

and the pleadings of an unfinished dream.

For no one will he invoke the certainty of the body

that grows dark amid the fears

and tracks of passions.

The rain has ceased

The rain has ceased

they are begetting days of death

fornicating their surprise

their sexes beat against all confidence

the brevity of what is written

requiem for the world.


Gran acto del ser

Desgajar el amor ante la puerta de Dios

Deletrear la pasión

Escriturar el gozo

Es/mi

Destinación.

Envuelta en la brevedad del goce

Desjuro mi ser

Multiplico el tiempo

Preciso lo extraño y lo bello

Mi deseo se desliza en el otro

Taciturnos del ensueño y del encuentro

Emergemos en la imagen confidente

Gusto la intimidad para estremecer lo perfecto

Huimos del número al vino del placer

En nuestro testimonio

El espejo no existe en la excomunión de los cuerpos

No compongo ritos al verbo

Desnudos acariciamos la mirada profana de la poesía

Mezclamos lo mortal y lo eterno

Salgo del día

Acojo en secreto la persistencia

Que se extiende en mi lecho

Mi destino juega la ficción del absoluto reposo.

Un remolino de eternidad

Se estremece en abrazos

Engendra el absurdo del juego

Mundos embriagados

De maldición y bendiciones

Nuestros cuerpos son libertades engarzadas

Provocadas por pura inocencia

O el rubor infraganti de la nada vacía de uno. En el escenario de la duda

En el escenario de la duda

el actor concibe la agonía

la ficción restituye

el telón recoge las últimas palabras esclavizadas al guión

La puesta del amor no tuvo actuaciones

sus días están entre la desembocadura del futuro

y las peticiones del sueño inconcluso

A nadie invocará la certeza del cuerpo

que se escurre entre el miedo

y los matemas da las pasiones.

La lluvia cesó

se engendran los días de la muerte

fornican su sorpresa

sus sexos golpean la confidencia

una brevedad el testimonio

réquiem para el mundo.

Alexis Levitin y Carmen Váscones

Textos de:
la muerte un ensayo de amores
Casa de la cultura ecuatoriana, Benjamin Carrion, Serie hoy #17, 1991