Un vacío, tan absolutamente lleno
UN POEMA DE SANDRA LUBER
EL PORQUÉ DEL AQUÍ
I
parada frente a la pila de la cocina
viendo las hojas de té
golpearse con tal casualidad
desplegándose con tal inmersión
como mi mente
entonces no hay dios
no Brahma, Vishnu, Shiva
que me creó …
que creó todas las cosas …
ni siquiera el elemento o partícula más pequeño
en el cual
me sigo dividiendo
y dividiendo
hasta ayer me di cuenta
he estado aquí por eones
separándome
agujereándome
etiquetándome
tratando de entender
llegar a un acuerdo con
algún tipo de verdad
para justificar
mi vida después
de tanta plenitud
enseñé inglés de secundaria al estilo California
redacté publicidad al estilo Chicago
edité películas de 35 mm al estilo Hollywood
viví en pueblos costeros mexicanos, al interior de Australia,
en las montañas de Costa Rica
y aún así…
mi ser
en esta intersección
con la pregunta aguda, persistente
¿por qué estoy aquí?
en este planeta
en esta forma
luchando
haciendo todo lo posible para
sobrevivir
pero no…
simplemente sobrevivir
eso sería demasiado fácil
más bien sobrevivir
con significado
con un propósito que valide el sufrimiento
la pérdida de un ser querido
la soledad
esta maldita impermanencia que atormenta
mi vigilia
II
sentada aquí en la ventana de la cocina
viendo nubes monzónicas gotear
las aguas de la vida
cierro mis ojos
buscando una reacción
desenterrando una respuesta
para esta palpitante consulta
pero…
no hay solución
simplemente una idea, una manera de
regresar a casa
volviendo
en dirección de marcha atrás
dejando pautas
reglas
intenciones, objetivos…
solo respirando hacia
ese lugar que no es un lugar
ese espacio que no es un espacio
algo como
puro silencio…
tan vasto, tan incomprensible
que nombre lo innombrable
porque después de todo
yo escribo con palabras
así lo llamaría:
una presencia, tan seductoramente completa
un vacío, tan absolutamente lleno
Sandra Luber es escritora de poemas y ensayos. Es autora de la obra de ficción visionaria Divine Intercourse y tres obras creativas de no ficción: Potluck with God, Meditate Your Way to a Bestseller y Confessions of a Bodhisattva-to-Be: Applying Buddhist Principles 24/7. En un artículo publicado en 1993 llamado “Creo que siento mis pensamientos” (Mind Matters Review), acuñó la frase “adicción emocional”. Sigue siendo el eje de su poesía y práctica budista. Ella reside en Tucson, Arizona.
Traducción: Ana C Blum
Corrección de estilo: Lizette Espinosa
THE HERE OF WHY
I.
standing at the kitchen sink
watching tea leaves
bumping casual
unfurling with immersion
like my mind
so there is no god
no Brahma, Vishnu, Shiva
that created me…
that created all things…
not even the smallest element or particle
which
i keep dividing
and dividing
until yesterday I realized
i’d be here for eons
separating
pigeon-holing
tagging
trying to understand
come to terms with
some kind of
truth
to justify
my life after
decades of living fully
teaching high school English California style
writing advertising copy Chicago style
editing 35 mm film Hollywood style
living in seaside Mexican villages, the Australian outback, Costa Rica’s mountains
and yet…
my being
at this juncture
the sharp, gnawing question
why am I here?
on this planet
in this form
struggling
making every attempt to
survive
but no…
not simply survive
that would be too easy
rather to survive
with meaning
with purpose that validates suffering
the loss of a Loved One
aloneness
this damned impermanence that haunts
my wakefulness
II.
sitting here at the kitchen window
watching monsoon clouds gush life’s waters
i close my eyes
looking for response
seeking to unearth an answer
to this throbbing query
but…
no solution
simply an idea like
coming home
or home coming
returning
reversing direction
leaving behind guidelines
rules
intention, goals…
just breathing towards
that place that is not a place
that space that is not a space
kind of like
pure silence…
so vast, incomprehensible
that did I name the nameless
because after all
i write with words
i’d call it
a presence, so seductively complete
an emptiness, so absolutely full
Sandra Luber is the writer of poems and articles, the visionary fiction Divine Intercourse, and three creative nonfiction works: Potluck with God, Meditate Your Way to a Bestseller, and Confessions of a Bodhisattva-to-Be: Applying Buddhist Principles 24/7. In a 1993 published article “I Think I Feel My Thoughts” (“Mind Matters Review”), she coined the phrase “emotional addiction.” It remains the lynchpin of her poetry and Buddhist practice. She resides in Tucson Arizona.